El Metropolitano cayó derrotado el pasado sábado en una abarrotada pista de Zorrotza ante el Molina Sport, lo cual complica sus opciones de meterse en playoff. Adam Schejbal, portero checo del conjunto canario, sería el absoluto protagonista con bloqueando 46 disparos.

El sábado a las 19:30 comenzó a rodar el puck en un partido cargado de nervios entre dos equipos que se juegan una plaza por el playoff. El equipo canario planteó el partido con dos líneas muy diferenciadas. Una primera línea muy potente, con el máximo puntuador de la competición Eduard Requena y los suecos Jacob Tenemyr y Carl Viktor Lindell, y una segunda línea de canteranos reforzada por Pawel Zasadny y Jose María Caraballo, ex de CPLV.

A los 8:17 del inicio de partido, Jacob Tenemyr inauguró el marcador con un tiro certero coló el puck por la escuadra izquierda de la meta defendida por Blake Ducker. El Metro intentó reaccionar pero una y otra vez sus ataques acababan siendo detenidos por Schejbal, quién comenzaba a desmoralizar a los bilbaínos. No sería hasta los minutos finales cuando Eduard Requena ampliaría la ventaja de Molina finalizando un buen contra ataque colocándo el 0-2 con el que se llegaría al descanso.

El Metropolitano dio un pasó adelante tras el descanso y fruto de ello vino el tanto de Iñigo Postigo a los 4 minutos de la segunda parte, gol que daba esperanzas para una posible remontada. Sin embargo, como ocurrió en la primera mitad, todas las intentonas de los locales fueron desbaratadas una y otra vez por el guardameta de Molina. Con el metro volcado en ataque, Requena volvería a aprovechar una contra para poner tierra de por medio y anotar el 1-3 a falta de poco más de 8 minutos para el pitido final. Ya en el último minuto, el Metro decidió retirar al portero para añadir un jugador de campo extra, pero esta situación fue aprovechada por Requena para anotar el definitivo 1-4 a portería vacía.

Si bien las opciones de entrar en el playoff se han complicado para el Metropolitano tras esta derrota, aún cabe esperanza ya que los de Bilbao tienen que disputar el partido aplazado de la décima jornada ante el CPLV, líder de la competición. No obstante el Metropolitano no depende de sí mismo para poder alcanzar la cuarta plaza, y tendrá que contar sus partidos por victoria para ello, y esperar a que el Molina pinche en alguno de los tres compromisos restantes.